Muelle de Puerto Colombia, 129 años.

 

Por: Helkin Nuñez Cabarcas

Foto: Alfonso Suárez Santamaría 

El Compromiso de construir Francisco Javier Cisneros dicho muelle, comenzó en la mañana del 14 de enero de 1.891 clavándose su primer pilote, fue necesario contar con la experiencia laboral de 120 hombres los cuales se turnaban día y noche para así culminar la obra el 9 de Junio de 1.893. El material utilizado en la construcción del muelle fue en su totalidad de 2.000 toneladas de hierro y acero traído de Bélgica y cerca de 5.000 pies de madera traída de Canadá, las que juntos formarían 4.000 pies de longitud en forma de línea recta y perfecta, inaugurándose el 15 de junio de 1893 "El tercer muelle más largo del mundo y el primero en América". Los festejos comenzaron dos días antes con la confirmación de la capitanía del puerto que los vapores Alvo, Atrato y Galicia fondearían en la bahía de Sabanilla, este último vapor hamburgués y comandado por el Capitán Pietsch fue el primer buque que atracó en el muelle, descargó una caldera de 9 toneladas.  

 

Un muelle que es revestido en concreto armado a mediados del siglo veinte para seguir fortaleciendo el servicio portuario, trabajos estos culminados por un aprendiz nativo como lo fue don Juan Antonio Colina de la Rosa; no fueron soluciones contundentes para que un presidente de la República en este caso Pedro Nel Ospina la tuviera en cuenta, el puerto se cierra definitivamente en 1942, trasladándose las operaciones portuarias a la capital Barranquilla. Lo antes anotado mantiene una razón de identidad cultural alrededor de un muelle que simboliza una parte del proceso marítimo del país, un espacio cronológico que desafió al mundo a finales del siglo XIX y comienzo del XX; que desde un lúgubre pueblo encontrado por azar, el mundo logró entrar sin ninguna restricción. Un pueblo que pudo establecer un servicio de modernidad en medios de comunicación, el ferrocarril por más de cuarenta años. Era el puerto marítimo de mayor importancia en el Caribe, visitado itinerantemente por grandes compañías marítimas tales como Hamburger American Line, La Veloce, Compañía Trasatlántico Española, Vapores Correo Franceses, Vapores de la Mala Real. Etc.

 

El abandono total al muelle es latente, parte de sus estructuras caen lentamente desde aquel 7 de marzo del 2009, cuando más de 200 metros de su viaducto desaparecieron, en la actualidad está fraccionado en 4 secciones. Los logros alcanzados por la administración Villalba Hodwalker llegaron a esclarecer el verdadero dueño de este Monumento Nacional, escrituras exhibidas establecía que la Nación Colombiana era su inmediata sobreprotectora; es así como se habilita un plan especial del manejo y protección del muelle, el PEMP “ que comprende la recuperación del muelle propiamente dicho, y también su zona de influencia, correspondiente a un amplio sector urbano del municipio de Puerto Colombia y las playas aledañas al muelle, de manera tal que permitirá la creación de un corredor turístico cultural que lo conecte con los otros bienes de interés cultural del ámbito Nacional, existentes en el municipio, como la estación del tren y el Castillo de Salgar”; hasta el momento ni una piedra se le ha asignado como motivo preventivo a siquiera sus dos pilotes a la entrada principal.

 (*) Helkin Alberto Núñez Cabarcas

     Funcionario Archivo Histórico del Atlántico

 

Tomado de 

HISTORIA GRÁFICA DE BARRANQUILLA, edición XII Entrega. Diario El Heraldo.

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